Ejercicios de relajación al pintar mandalas

Para poder llevar a cabo los ejercicios al pintar mandalas necesitarás de imágenes de éstas que podrás encontrar en Internet, libros, o tú los puedes diseñar. En este punto no te preocupes de los trazos ya que lo importante son las diversas acciones que debes llevar a cabo mientras las pintas.

Los dos ejercicios que puedes realizar son:

• Relajación
• Interiorización

Relajación

Primero tienes que elegir una mandala (este paso lo tienes que repetir en las diversas situaciones para todos los ejercicios). Selecciona los materiales que utilizaras para el pintado y las técnicas. Después piensa en todo aquello que te generan especial ansiedad, estrés y angustia; pero no trates de buscarles la causa o solución. Ahora comienza a dibujar la mandala, no te preocupes de los resultados, sólo enfócate en la relajación; si es de tú preferencia puedes recurrir a la música procurando que sea instrumental o zen. Cuando hallas terminado coloreado en una hoja aparte o dentro de la misma mandala escribe lo que sientes y como es qué te sientes; señala la causa que piensas provocó esas emociones. Inmediatamente escribe diversas soluciones que le darías. Finalmente escoja la que más te agrade y convenga, además te ayude a liberar toda la tensión acumulada. Mira fijamente la mandala terminada y pon principal atención en tus trazos; notarás que conforme avanzaste tu mano adquirió soltura al igual que tu muñeca, prueba de que has conseguido liberar un poco la tensión.
Como paso externo descansa unos diez minutos en el lugar en que hiciste la mandala.

Interiorización

Elije la mandala. A continuación pregúntate "¿Quién soy yo realmente?. No busques la repuesta de golpe, sino quédate reflexionándolo por lo menos 5 minutos, concéntrate en tu respiración, ésta debe de ser rítmica y relajante. Al cabo del tiempo que ha decidido reflexionar empieza a colorear la mandala desde la circunferencia o contorno exterior hacia el centro manteniendo siempre la respiración rítmica y calmada. Cuando vayas realizando esto date cuenta de las emociones que se generan en tu mente (este proceso empiézalo desde que iniciaste el coloreado hasta el final, anota cada una de las sensaciones).
Compara tus sentimiento y emociones con respecto el avance del coloreado.